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miércoles, 3 de junio de 2009

UN EXPERTO, CRITICO IMPARCIAL Y ESTUDIOSO DEL OLPC, TITULA: "Así pasó la gloria de la computadora de los 100 dólares"

Le voy a robar el articulo completo, no se si inflinjo alguna ley, pero creo que vale la pena enterarnos de lo ultimo ultimo que pasa en el mundo real con el OLPC, inspirador de nuestro folkclorisimo Plan Ceibal.
Ya se, es largo, pero lean hasta el final, es muy jugoso, y puede que ubique a algun ingenuo en un justo termino.
NOTA: los parrafos en rojo, son subrayados mios.

EL BLOG PERSONAL DEL AUTOR DE ESTE TRABAJO, ALEJANDRO PISCITELLI, AQUI.

Así pasó la gloria de la computadora de los 100 dólares


De OLPC a Apple

Hace pocos días una noticia bomba surcó las redacciones digitales del planeta. Apple -la empresa mas cercana a nuestro corazón- había contratado a Iván Krstic, quien había tenido un desempeño excepcional en el proyecto OLPC, en el cargo de director de arquitectura de seguridad, habiendo implementado BitFrost, un maravilloso sistema de seguridad.

O sea que Iván fue junto a Walter Bender, Mary Lou Jepsen, Jim Gettys y el propio Nicholas Negroponte uno de los padres de la criatura OLPC, así que su renuncia hace un año al proyecto -mucho antes del despido masivo de la plantilla a principios de 2009- tenía un simbolismo especial.

A diferencia de lo que ocurrió con Jepsen, quien creía cumplida su misión en OLPC y tenía esperanzas de avanzar mas rápido y con otros horizontes en los desarrollos innovadores de pantallas, la salida de Krstic parecía obedecer a cuestiones mas ideológicas y conceptuales, relacionada con los coqueteos de Negroponte con su archirrival y finalmente verdugo Microsoft -junto a Intel (imperdible la nota de Bryan Appleyard Why Microsoft and Intel tried to kill the XO $100 laptop-, que a proyectos personales que en esa época ni existían.

Lo cierto es que Krstic, para su sorpresa y alegría, fue aceptado por el MIT para hacer su doctorado, estuvo en varios boards mientras tanto y final -e inesperadamente- rechazó la oferta, se mudó a California- y terminó en Apple adonde está trabajando desde hace apenas una semana.

Una historia de fracasos.. encubiertos

Pero aquí no nos interesa tanto el deambular de un joven talentoso, sino un post suyo de hace un tiempo en el que con el pretexto de protestar contra el modo en que OLPC abandonó su apuesta en favor de Linux, cediendo a las tentaciones de Windows, Krstic aprovechó para darnos una visión desde dentro de OLPC, y mas aun del compromiso (fallido según él) de larga data de Negroponte con el construccionismo papertiano, en donde deja al desnudo falencias ancestrales, compromisos inmotivados, una danza de egos sin fin (de la que él también participa) y, sobretodo, revela una vez mas la imposibilidad de un diálogo productivo entre tecnología y educación.

La lectura que hace de Krstic de la relación entre Alan Kay, Seymour Papert y Nicholas Negroponte es la misma de siempre. Sólo que esta vez en términos invertidos. Mientras que Negroponte siempre la vivió como un círculo virtuoso, Krstic insiste en que los variados intentos previos de Negroponte de vender como educativamente revolucionarios los usos de computadoras en el aula (en los que él intervino) fueron todos sonoros fracasos.

Desde la alianza con el gobierno francés por alojar a la legendaria Apple ][ en un suburbio de Dakar, Senegal en 1983, pasando por el Project Headlight, un intento de saturar con un curriculum construccionista completo la escuela primaria para chicos pobres de Hennigan, hasta la instalación de una escuela con máquinas convencionales Panasonic Toughbooks , sin ningún software ni enfoque construccionista en Camboya, en un proyecto manejado por su hijo Dimitri, los tres ejemplos que siempre Negroponte promocionó como éxitos sin fin, no fueron -según Krstic- sino enormes fracasos encubiertos.

El desprecio de los pilotos y cierto tecnoutopismo al que hay que mirar con sumo cuidado

No sabemos cuanto de tristeza y de decepción hay en los dichos de Krstic. En algo concuerda con Negroponte: nadie sabía como funcionaría bien un programa de saturación 1 a 1, porque en ese momento -hasta el caso de Uruguay iniciado en 2008, que genera tantos aplausos como críticas- nunca nadie lo había intentado.

Pero las objeciones mas de fondo de Krstic pegan en un par de talones de Aquiles del proyecto OLPC -además de en el ego incontrovertible de Nicholas, inmutable en su estilo K de “se hace a mi manera o sino no se hace nada”-, cuales son,

- uno, la idea de que todo chico es un programador en potencia, y entonces preferirá máquinas con las que practicar, controlar la tecnología y en definitiva convertirse en ciudadanos iluminados.

- dos, la adhesión de Negroponte al tecnoputopismo sesentista, una de las dos ramas iniciáticas de la computación -la otra, la que ganó la partida hasta hoy fue la de Bill Gates- (ver What the Dormouse Said: How the Sixties Counterculture Shaped the Personal Computer Industry de John Markoff (2006)).

Krstic es bastante sangriento y cáustico sobre este punto. Según él antes que hacer experimentos masivos en programación inducida, lo que habría que poner en las laptops es un software que funcione. Y en cuanto a que en tanto ese software forme parte de la cultura libre mejorará de por si la educación, le parece mas bien, un efecto propagandístico de Richard Stallman, antes que cualquier hipótesis demostrable.

El deconstruccionismo nunca fue probado, ¿debería serlo?

Lo que mas debería interesar de la visión de Krstic es su narrativa de insider. Pero algo chirría en su relato cuando para criticar la perspectiva construccionista de Papert cae en las posturas mas convencionales provenientes de los sectores mas reaccionarios del establishment educativo.

Krstic pide a gritos pruebas de que el construccionismo funciona a gran escala (¿lo hace acaso la visión conductista estándar?) y exige ¿dónde están los estudios que muestran que el software libre es mas eficaz educativamente que el propietario, insistiendo en que a los estudiantes les importa un bledo el fundamentalismo filosófico de Stallman, que vuelve equivalentes libertad política y programación abierta?

Pero aquí Krstic mezcla dos lineas críticas que no tienen nada que ver una con la otra. Su cuestionamiento -por razones narcisistas- de Negroponte y Stallman, con consideraciones muy vagas y elementales acerca de los fundamentos del aprendizaje. En lo primero concuerdo plenamente con él. Puede ser que a un grupo de chicos (y a veces chicas) les interese jugar con la programación en términos de empowerment -un buen equivalente del artesanado de ayer al que nos invita a regresar Richard Sennett-, pero cuando se trata de hacer algo (no de hacer el hacer), entonces parece que no hay nada mejor que el Mac OS X, especialmente cuando se trata de temas de seguridad de fondo.

El tema es intrincado porque Krstic ataca por dos lados distintos, uno totalmente equivocado y el otro totalmente correcto. El equivocado es descartar la posibilidad de una enseñanza no convencional basada en los principios anti-pedagogicos de Papert. El correcto atacar despiadadamente a Negroponte por su oportunista rendicion a mnos el Gran hermano Gates.

Mas aun, la jugarreta que le habría hecho a los devotos defensores de Sugar/Linux insistiendo en que Sugar también correrá sobre Linux cuando -en privado- le habría dicho a Krstic que su desideratum actual es proveer máquinas solo-XP, lo pondrìa en el bando de los villanos. ¿Pero debemos creerle a Krstic cuando insiste en que el propio Negroponte le habria dicho que el aprendizaje nunca fue parte de la misión, y que el verdadero objetivo era diseminar la mayor cantidad de laptops posibls en el mundo (como hijos de Lugo), ya que teorizar (e incidir) sobre el aprendizaje seria algo presuntuoso?

Tres fases y escapando como a la peste a la tercera

Un programa uno a uno tiene que resolver tres problemas gigantescos en orden ascendente de complejidad. Elegir la máquina correcta, hacérsela llegar a los chicos y usarlas para crear experiencias de aprendizaje y enseñanza significativas. Si la industria hasta mediados de 2006 se desinteresó del primeropunto, fue justamente por los nulos márgenes de ganancia que suponía una computadora de 100 o 200 dólares -aunque la cosa está cambiando con las webtops aunque éstas cuestan cerca de U$S400.

Si hay algo a lo que la industria informática le tiene tirra es a la logística. Y si el caso uruguayo fue mas o menos bien resuelto -esto debido a la clarividencia y tesón de Miguel Brechner del LATIU y no a ninguna ayuda o presencia de OLPC-, el ejemplo peruano está resultando un infierno. No importa mucho si como dice Krstic, las 360.000 XO están circulando al garte, o si Waltyer Bender realmente se fue porque no podía seguir trabajando en una mentira. No nos conmueve mucho la carta que Krstic le envió a Negroponte en diciembre de 2008 insistiendo en que con la distribución concurrente en Mongolia, Uruguay y Perú había posibilidad de que todo saltara por los aires.

A menos que… como dice Krstic, el hecho de OLPC haya renunciado a diseñar, supervisar y concretar una logística eficiente, rápida y de llegada fina al usuario final, pudiera hundir todo el proyecto, llevando al descrédito como nunca antes ocurrió la misma idea de saturación.

Del mismo modo, que OLPC haya renunciado a ocuparse en serio (y de esto soy testigo en las 4 o 5 reuniones que tuvimos en Boston con Negroponte, un par de ellas con Seymour Papert presente) de la conversión del artefacto en entorno de aprendizaje, puede también costarnos un descrédito que llevará años sino décadas revertir.

Demasiadas críticas para tanto sentido común

Aquí Krstic vuelve a equivocarse al insistir en que sabemos tan poco del aprendizaje que la única garantía de que funcione es si imaginamos entornos en donde los docentes juegan un rol central. En lo que si tiene razón es en que la única forma de llamar educativo al proyecto OLPC es si el mismo está enderezado hacia un aprendizaje abierto, colaborativo, compartido y exploratorio.

Krstic vuelve a sorprendernos con una propuesta insólita, desacoplar en el Sugar los aspectos colaborativos de la nueva interfaz gráfica. Con un argumento llamativo. Ya que somos pocos concentrémomos en algo, y en vez de intentar luchar contra la metáfora del desktop concentrémonos en los aspectos colaborativos.

Visto desde su perspectiva de programador el punto es entendible. Lo mas cuesta cuando se porta Sugar, no son sus características colaborativas, sino las interfases gráficas. Liquidémoslas y será mucho mas fácil avanzar por el lado del aprendizaje. Según Krstic desde la perspectiva de la misión educativa no importa bajo qué Kernel esté corriendo Sugar, si éste permanece abierto y libre.

Si no puedes con ellos, unete a ellos parece decir Krstic. El mismo queacusa a Negroponte de traicionar los fundamentos del software al pasarse a Windows tout court, insiste en un Sugar degradado, compatible con Windows (perdón compatible con la metáfora del desktop) es por lo que realmente vale la pena luchar y por eso prefiere que Bender en vez de crear una Sugar Foundation,cree una Open Learning Foundation. Y en eso está de acuerdo con casi todos los que conocemos del bando tecnològico colonizados por la metáfora de las ventanitas, quienes por una cuestión de compatibilidad, familiaridad, naturalización e inercia epistemológica, insisten en que no hay que pelearse con la metáfora del escritorio.

La IBM Global Services de los programas de laptops 1 a 1.

Según Krstic OLPC no debería ser tan fundamentalista acerca de sus equipos pero de ninguna manera debería regalarse a Windows exclusivamente. Para él OLPC, debería ser la IBM Global Services de los programas de laptops 1 a 1.

Como ven la cosa es bien compleja. Las propuestas mayestáticas de OLPC se van deshilachando como los gajos de la margarita y ya no sabemos si nos quiere, o no nos quiere. O si nosotros la queremos o no la queremos.

Habiendo tantas variables intervinientes, las posibilidades de éxito en Perú, Uruguay o Mongolia son remotas y dudosas. Y sin embargo lo que esta doble discusión acerca de si interfaz gráfica si o no, y si debemos ocuparnos solo de la maquina y no de la logística o la pedagogía (o si también de ambas dos), encubre es algo muchísimo mas de fondo, que un programador como Krstic ni siquiera puede intuir.

En épocas de abundancia de información, y habiéndose demostrado mil y una vez que los chicos pueden aprender sin que nadie les enseñe, ¿cuál es el rol del docente, cuál es el rol del docente con una máquina a la mano, cuál es el rol del docente con máquinas conectadas a Internet, cuál es el rol de la máquina, y que pito toca un proyecto como OLPC en este mar endiablado?

Ja por algo estamos escribiendo un libro sobre ese tema. Ni un post ni diez podrían agotarlo, o siquiera empezar a desovillarlo.

Nota original de Krstic Sic Transit Gloria Laptopi

Información adicional A new adventure

Categorías Ciberculturas, Crónicas, Diseño, Inteligencia Colectiva, Irreduccionismo, OLPC, Polialfabetismos

Les dejo algo sobre el autor de la nota, Alejandro Piscitelli.

Alejandro Gustavo Piscitelli ciudad7.jpg Gerente General de Educ.ar. Portal educativo de la Nación argentina. Ex-Presidente de Edutic. Asociación de entidades de educación a distancia y Tecnologías Educativas de la República Argentina. Ex-Director de contenidos de competir.com. Consultor organizacional en Internet y comunicación digital. Profesor Titular del Taller de Procesamiento de Datos, Telemática e Informática. Carrera de Ciencias de la Comunicación, Facultad de Ciencias Sociales, UBA. Docente de cursos de post-grado en la UBA, Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO), Universidad de San Andrés, y varias Universidades argentinas, latinoamericanas y españolas.

Coeditor del diario electrónico Interlink Headline News desde 1995. Publicó Internet. Imprenta del siglo XXI. Barcelona: Granica, 2005. Meta-cultura, El eclipse de los medios masivos en la era de InternetBuenos Aires: La Crujia, 2002. Ciberculturas 2.0. En la era de las máquinas inteligentes. Buenos Aires: Paidos, 2002. La generación Nasdaq. Apogeo ¿y derrumbe? de la economía digital. (Granica, 2001), Post-Televisión. Ecología de los medios en la era de Internet (Paidos, 1998), (Des)Haciendo Ciencia. Conocimiento, creencias y cultura. Buenos Aires: Ediciones del Riel, 1997.

Entre sus principales actividades profesionales previas se cuentan: Director de contenidos de datosenlaweb.com, consultoría en Grupo Clarín, Silicon Graphics, Instituto Nacional de Educación Tecnológica, CEPAL, etc. Fue: Secretario Adjunto del Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (CLACSO), Subsecretario Académico de la Carrera de Sociología, UBA; Asesor de la Secretaría de la Función Pública, Presidencia de La Nación.

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Si alguien inquieto llego hasta aca abajo, esto fue lo que comente en la pagina de Piscitelli, con respuesta posterior del mismo al final:
Jorge Olivera { 06.03.09 at 4:13 am }
"En épocas de abundancia de información, y habiéndose demostrado mil y una vez que los chicos pueden aprender sin que nadie les enseñe."
Toda generalizacion tiene en comun, igual las estadisticas, que dejan de lado las realidades individuales, y al promediar, pueden llegar a conclusiones falsas. En esta frase me parece ver esto mismo, pero en forma extrema. No soy un "profesional" de la enseñanza, solo soy un padre de tres hijos. Todos diferentes entre ellos, a pesar de que "cientificamente" llevan una misma carga genetica...que extraordinario que es esto, verdad?
Si tomamos un grupo de niños ( como no soy experto no se si con eso de "aprenden sin que nadie les enseñe", estamos hablando de grupos que aprenden cosas sin que nadie les enseñe, o estamos hablando de niños aislados, perdon por mi ignorancia), que no tienen ningun parentesco, creo que deberia haber entre ellos, niños inquietos, niños con confianza en ellos mismos, niños timidos, niños muy capaces pero muy vagos, niños de escasa inteligencia pero mucha voluntad, niños llenos de conflictos, niños emprendedores, niños apaticos..¿ nada de esto influye en esa "colosal" afirmacion de que "En épocas de abundancia de información, y habiéndose demostrado mil y una vez que los chicos pueden aprender sin que nadie les enseñe."?
De que sirve contar con abundante informacion, si no tenemos idea de que sea correcta. Claro que aprenden solos, mientras leen, pero alguien les tiene que haber puesto en la cabeza el incentivo de la lectura. Si no son los padres, tendrian que ser los docentes. Pero saben que? Muchos son mas apaticos que el mas apatico de los niños, muchos docentes no tienen incentivos, ni siquiera una cultura vasta como los antiguos docentes, muchos son geeks, y algunos de estos, son expertos en hacerles el harakiri a su profesion, no entiendo basados en que...
Pido disculpas por la falta total de tildes, no se que extraordinario don me ha sido concedido, ya que no los necesito ni para escribir, ni para entender lo que leo !!!!
Un saludo cordial.
Jorge Olivera
http://bloguentarios.blogspot.com
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Piscitelli { 06.03.09 at 10:20 am }

Jorge, justamente porque todos los chicos son distintos necesitan de enseñanzas distintas que pueden ir desde la mas conductista de todas, a las constructivistas mas extremas que podamos imaginar. Extremando la visión -y en una plan de antipedagogía radical- Jacotot insiste en que lo mas preciado que todos tenemos, que es nuestro propio lenguaje, lo hemos aprendido sin que nadie nos lo enseñe. Seguramente este enfoque no sirve para convertirnos en físicos nucleares o en filólogos hispánicos, pero tiene mucha tela para cortar. Fijate en los posts mas recientes de Filosofitis donde vamos en dirección de una enseñanza alumnocéntrica y de las pedagogías de la colaboración inexistentes hoy en el primario, el secundario y sobretodo la universidad. Por mas que los docentes se desgarren (retóricamente) las vestiduras en contrario. En tiempos de errrores epistemológicos sistemáticos, que estan llevando al colapso al sistema educativo y a la frustración a millions de estudianets necesitamos de afirmaciones colosales -pero sobretodo ilustralas, diseñarlas, implementarlas-. Nada menor alcanza para nada. Respetuosamente